Una novela que hila destinos y deshace estereotipos
Escrita por Natalia Menéndez y publicada por Pintar-Pintar Editorial, esta novela juvenil entrelaza literatura, libertad y feminismo en un relato sobre el destino y la escritura.
Nota de prensa
En «Merlot», la nueva novela juvenil de Natalia Menéndez, el destino no es una línea recta, sino un tapiz tejido con hilos de posidonia, polvo de estrellas y preguntas que desafían las normas. Avaluna, una joven hilandera, y Sira, una princesa que rechaza los planes que otros han trazado para ella, protagonizan este relato fantástico que, como sus propias protagonistas, se atreve a imaginar un mundo distinto.
«La única manera de enfrentarse al mundo es haciéndose preguntas», dice Menéndez, y esa premisa vertebra esta historia de crecimiento, libertad y escritura. Con un lenguaje con carga poética y visual, «Merlot» se inscribe en la tradición de los cuentos maravillosos, de los cuentos de hadas, pero los lleva más allá.
Una relectura del cuento de hadas en clave feminista
Desde las primeras páginas, «Merlot» plantea una pregunta central: ¿y si el futuro no estuviera escrito? «Quería construir mi propio cuento de hadas», señala Natalia Menéndez. «Los cuentos tradicionales forman parte de nuestro bagaje literario y son la base de muchas narrativas posteriores. Pero también han relegado a las mujeres a papeles pasivos. Yo quería una protagonista activa, que escribe su propia historia».
Sira, la princesa heredera, no quiere contraer matrimonio ni obedecer las expectativas impuestas por la corte. En vez de eso, galopa por los bosques, escribe poemas heroicos y sueña con ser libre. «Sira no es la primera princesa rebelde, pero quería que su rebeldía estuviese también ligada al deseo de contar. Las mujeres escritoras han sido invisibles durante siglos. Con ella quise rendirles homenaje».
Una narrativa sensorial, visual y simbólica
El universo de «Merlot» se construye con texturas, sonidos, aromas y colores que lo convierten en una experiencia sensorial. «Desde mi anterior novela, el uso de los sentidos forma parte de mi estilo. Me ayuda a crear mundos imaginarios en los que el lector se sumerge por completo».
El taller de hilanderas, las islas de Misu y Argenta, el palacio real de Ciudad Amurallada o los mercados marítimos vibran con detalles que conectan al lector con un mundo mágico que se siente cercano. «El polvo de estrellas, la posidonia, los hilos invisibles… son símbolos que hablan de vínculos, de decisiones, de afectos».
Amor, identidad y libertad en los vínculos
Aunque el conflicto principal es político y existencial, la novela está surcada por vínculos afectivos: la atracción tímida entre Oriana y Dacio, la complicidad entre Sira y Nuño, el lazo onírico entre Avaluna y la heroína Hadewijch. «Quise retratar esos primeros amores adolescentes, cuando los sentimientos aún no tienen nombre, pero ya lo cambian todo».
A diferencia de los cuentos clásicos, donde el amor culmina en un matrimonio pactado, aquí el amor es descubrimiento, pregunta y elección. «En los cuentos tradicionales, las relaciones estaban marcadas por alianzas. Aquí me interesaba mostrar ese primer despertar, los matices, las dudas, la ternura».
Escribir para ser y existir
Uno de los aspectos más singulares de la novela es cómo Sira encuentra refugio y sentido en la escritura. «Muchas veces escribimos porque no hay otro modo de existir como queremos. La literatura ha sido una forma de resistencia para muchas mujeres, y eso está también en Sira».
La princesa crea una heroína —Hadewijch— que, sin saberlo, está tejida por Avaluna. Así, texto y tapiz se entrelazan en una reflexión sobre la creación artística como forma de emancipación. «Merlot es también una metáfora de la escritura. Las tejedoras son narradoras: trenzan futuros como quien escribe una historia».
Entre los mitos y el mundo docente
La imagen de las tejedoras del destino proviene de una rica tradición mitológica. «No solo de la Grecia clásica, también de los mitos escandinavos o precolombinos. Me fascina cómo en todas las culturas hay figuras que controlan los hilos de la vida».
Como docente, Natalia Menéndez reconoce el potencial pedagógico del texto: «Aunque no era mi objetivo inicial, Merlot puede ser un recurso en el aula para hablar de literatura, mitología, igualdad de género y escritura creativa».
«Hay valores como la amistad, la valentía o la toma de decisiones que pueden trabajarse con estudiantes de forma cercana. Y además, abre puertas para explorar la literatura épica desde otro enfoque».
Resumen
A veces, la única manera de enfrentarse al mundo es haciéndose preguntas.
En el reino de Merlot, el destino de cada habitante se teje con hilos de posidonia y polvo de estrellas. Nadie escapa a lo que está escrito. Nadie… excepto quienes se atreven a desafiarlo. Avaluna es una joven hilandera que ha crecido creyendo que su única misión es hilar el porvenir de los demás. Sira, la princesa heredera, lucha contra un destino impuesto que no desea. Cuando el rey Altair ordena cambiar el futuro de su hija, ambas se ven atrapadas en una telaraña de secretos, decisiones imposibles y revelaciones que podrían transformar el reino para siempre. Pero, ¿y si el futuro no estuviera escrito? ¿Y si cada persona pudiera tejer su propio destino?
En una tierra de islas misteriosas, aves vigilantes y tapices encantados, Merlot es una historia de aventuras, valentía y libertad. Una novela para quienes sueñan con desafiar al mundo y escribir su propio camino.
Sobre la autora
Natalia Menéndez (Avilés, 1973) es profesora de Lengua y Literatura en un instituto de enseñanza secundaria, actividad que compagina con la escritura, el dibujo y los viajes. Ha visitado más de veinte países, ha publicado seis libros de poesía, una veintena de relatos en libros colectivos y más de cien artículos en prensa. Le encanta coleccionar palabras y combinarlas para dar forma a todos sus sueños. Otros libros publicados: El faro que no miraba al mar (2023), Calibán (2020), Invadir Babel (2017), Ciencias Inexactas (2014), El síndrome Kalashnikov (2012), Restos de un naufragio (2008), La nostalgia del caníbal (2007) y Las virtudes cardinales (2007).
Una novela para…
- Jóvenes lectores/as a partir de 11 años.
- Docentes que buscan textos para trabajar identidad y literatura.
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- Clubes de lectura con mirada crítica y creativa.
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Ficha técnica:
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Pintar-Pintar Editorial
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Creemos en una literatura infantil libre, respetuosa con la inteligencia y la sensibilidad de niñas y niños. Una literatura que inspire, que invite a pensar, a imaginar y a descubrir el mundo con mirada crítica y curiosa. Nuestros libros no son herramientas de adoctrinamiento ni manuales de conducta, sino espacios vivos donde habitan el arte, el juego y el conocimiento.
Además de nuestra labor editorial —reconocida con el Premio Nacional a la Edición en 2008, 2012 y 2014—, desarrollamos actividades culturales y educativas con el objetivo de acercar la lectura y la creación artística a las aulas y a la sociedad. En Pintar-Pintar Editorial, cada proyecto nace con el deseo de sembrar preguntas, despertar emociones y acompañar a los jóvenes lectores en su desarrollo integral.
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